La aventura de Lucas*

Lucas volvió del colegio cansado y hambriento como, todos los días. Su mamá lo esperaba como siempre con la comida lista y, como todos los días, miró un rato la tele hasta que fue hora de hacer su tarea.

Esa tarde, él tenía que terminar de leer “El Aprendiz” para hacer la tarea que le habían mandado, pero el silencio y el sueño le hacían cerrar los ojos de vez en cuando.

Sin darse cuenta cómo, apoyó la cabeza sobre el libro y se durmió dejándose arrastrar por un sueño pesado, atrapante.

En su sueño se vió vagando por Buenos Aires, pero no por la ciudad que él conocía sino por otra mucho más antigua. Caminó por una recova que nunca había visto y oyó gente gritando y también discutiendo.

Aunque Lucas no sabía qué pasaba, ni sabía quién era la gente con la que se cruzaba, tuvo el presentimiento de que iba a participar de alguna manera en esa historia.

Sin saber por qué, atravesó una puerta antigua, entró a un patio colonial con un aljibe y siguió caminando hacia donde había gente reunida. Las voces lo guiaban. Entonces, vió entre esos hombres a un joven y supo que era Nino.

Cuando salieron a la calle a pelear, corrió tras él y se situó a su lado en el combate. En ningún momento sintió miedo, tenía el valor de los que defendían la revolución.

Cuando Lucas fue herido ni siquiera lo notó, fue como un fuego intenso, sólo sintió el golpe en la cabeza contra el suelo y al abrir los ojos vió su cuarto, su libro y a él mismo tirado en el piso.

Manuel Alejo De Deco 1º “A”

* Cuento presentado en la mesa de Selección de Trabajos para el Café Literario Distrital